La nueva reforma laboral que intenta introducir el PSOE significa la mayor agresión a los derechos de los trabajadores y trabajadoras de la democracia.
La jornada de huelga debe servir de detonante para posteriores y más amplias movilizaciones.
Una reforma laboral que se pretende justificar con la crisis, pero que en realidad sólo está orientada a dar más facilidades a las empresas para hacer contratos irregulares, ignorar los convenios colectivos y despedir más barato a los trabajadores. Una reforma que significará más temporalidad y desregulación en la contratación; una sustancial rebaja en la indemnización por despido improcedente; enormes facilidades para que las empresas se descuelguen de los convenios en materias como el salario, la jornada o los horarios. Más precariedad, más inseguridad, menos sueldo, menos derechos. Así gobierna el PSOE.
Ante el deterioro tan grande de la situación, CC.OO. y UGT llaman a la Huelga General, más bien paro de 24 horas, obviando su corresponsabilidad y complicidad en la situación alcanzada, solo aspiran a volver a las andadas, a recuperar la “mesa de diálogo”, y utilizarán esta jornada para conseguirlo.
Aunque entendemos el rechazo que en principio su llamamiento pueda producir, las consecuencias que provocan la continuidad de las políticas neoliberales de este gobierno, nos exigen hacer algo, tenemos que tomar conciencia que la protesta de un día no es la solución, y que si nosotros no somos los que luchamos por nuestros derechos, estamos condenados a más paro, más precariedad, más desigualdad, más pobreza...
Desde la CNT proponemos otra forma de actuar: la lucha por nuestros derechos y nuestra dignidad. Sin subvenciones, sin liberados, sin hipotecas políticas. Por eso, aunque no podemos asegurar a nadie que vayamos a poder tumbar esta reforma, lo que sí podemos afirmar es que nos dejaremos la piel en ello. Llamamos a todos los que quieran formar parte de esta lucha a que acudan a nuestros sindicatos y se organicen en la CNT.
Por eso llamamos a la Huelga General el día 29 de septiembre. Para que esa jornada sirva de detonante de las movilizaciones que los trabajadores tenemos por delante si queremos parar la Reforma Laboral e iniciar el camino para recuperar nuestra dignidad.
